La cartilla

La Cartilla.

Me imagino a mi papa sentado en el patio de la vieja casa de Catia, con un cuchillito de cacha de hueso una hoja de segueta y un martillo, en la tarde llena de neblinas labrando en la madera ,una a una las letras del abecedari

o de la A a la Z,con la Che la LL y la RR. Con su paciencia de hombre sabio, varias veces se corto los dedos sin rendirse, me cuenta Irma mi madre, que luego de terminar de labrar las letras Mi papa se dio cuenta que no tenia con que pintarlas , usando su ingenio destapo su caja de crema para zapatos Kiwy y quemandola, obtuvo la pintura y pinto una a una las rusticas letras con un pincel.Luego vinieron otras paciencias,enseñar estos signos abstractos a un niño de cuatro años, ni siquiera lo recuerdo. Por un milagro de la vida todavía tengo mi primera cartilla ,mis cuatro hermanitos(ya cuarentones y cincuentones) también aprendieron las letras en esta tabla mágica que sobrevivo casi indemne a mas de veinte mudanzas y una vida de cambios en cincuenta años.Cuando la tengo en las manos me parece un trozo de madera de un naufragio antiguo ,y es asi es un pedazo de vida que le ha ganado la carrera al tiempo. En ella aprendi a descifrar los Jeroglíficos mágicos de la escritura.Hoy es uno de mis tesoros que ha trascendido lo material, en este viejo pedazo de madera , las gotas de sangre de mi padre regaron las letras de mi primera silaba leída, Sueño que algún día otro niño pueda aprender en ella sus primeras letras así se cerraría el circulo de mi cartilla mágica.

Juan Francisco Lara fernandez agosto  2012